Semana extraña.
Suerte que el martes me voy de viaje a Holanda, porque la verdad es que el ser humano nunca dejará de sorprenderme...y las cosas, viajando, se digieren mejor.
Mis alumnos me mandan correos diciendome en inglés 'I miss you', mientras que el hueco dejado por otras personas se agranda, se obstruye y se cierra.
No entiendo muchas cosas.
No entiendo que alguien, días antes diga 'nunca haría tal cosa', y luego la haga y no admita reproches.
No entiendo la capacidad de dejarse absorber, porque ya me absorbieron una vez, lo intentaron otras muchas, y no aguanto ningun tipo de 'monopolización'...pero claro...yo soy yo.
Hay una chica nueva en mi vida, cruzada por el destino, que se ríe de todo y le da igual todo...tal y como yo he sido casi siempre. Viene a aportar esa carencia de risas y dar fuelle a la monotonía. Quizá cuando vuelva de Amsterdam quedaremos, y a ver si juntos nos reímos igual que por internet.
Mañana sábado llueva o truene iré a la playa, necesito nadar, necesito caminar por la orilla salada.
Es curioso pensar que hay un profe que va detrás mía y no me gusta, y el que me gustaba se marcha. Como decía el dicho andaluz, 'al que mej quiere no loj quiero, y el quej quiero no mej quiere'. Es divertido.
Voy a empezar a buscar piso. No soporto más esta guarrería. La idea es mudarme en septiembre quizá, y no descarto, por caro que sea, vivir solo...viendo como está el panorama de inquilinos irresponsables, pasotas y abandonados.
Aprovecharé el verano lo que pueda para playita, fiestas, cine fresquito (aunque la calidad decae en verano) y conocer gente.
No puedo dejar que mi ánimo se afecte tanto porque a los demás les falte autocrítica.
sábado, 20 de junio de 2009
jueves, 18 de junio de 2009
SE MARCHA...Y NO PUDE RETENERLE...
Se vuelve a Santiago.
Me lo dijo ayer.
Se marcharán esos labios carnosos que desatan mi fuego...
esos ojos de largas pestañas y mirada perdida...
ese flequillo suave que tiene que andar retirando de sus cejas...
esa forma de ser suya...que aparenta estar en bavia, en las nubes, meditando o descifrando algún enigma existencial de la vida...
Se me va....¡ay! ¡se me va!
y no pude decirle que su presencia me eclipsa...
No pude saborear la miel de sus labios, no pude quemar su piel con la llama de mi piel, no pude hacer que su mundo 'ennortao' y ensimismado se uniera con mi inquieto y torrencial mundo.
Cuán perfecta habría sido esa combinación...alguien que me aportase silencios, miradas sostenidas, paz y humor...
Pero se va...
¡ay se me va!
y sus labios quedarán en mi recuerdo.
Me lo dijo ayer.
Se marcharán esos labios carnosos que desatan mi fuego...
esos ojos de largas pestañas y mirada perdida...
ese flequillo suave que tiene que andar retirando de sus cejas...
esa forma de ser suya...que aparenta estar en bavia, en las nubes, meditando o descifrando algún enigma existencial de la vida...
Se me va....¡ay! ¡se me va!
y no pude decirle que su presencia me eclipsa...
No pude saborear la miel de sus labios, no pude quemar su piel con la llama de mi piel, no pude hacer que su mundo 'ennortao' y ensimismado se uniera con mi inquieto y torrencial mundo.
Cuán perfecta habría sido esa combinación...alguien que me aportase silencios, miradas sostenidas, paz y humor...
Pero se va...
¡ay se me va!
y sus labios quedarán en mi recuerdo.
domingo, 7 de junio de 2009
'MI GRAN CENA GRIEGA'
Tras la semana de bajada a los infiernos, anoche tenía que ayudar a mi compañera de piso griega, Katerina, a preparar la cena griega que se había comprometido a hacer.
Ella no ha cocinado nunca, tiene una gran 'mamma' que no deja que sus hijos metan las narices en la cocina, pero aun así ha querido cocinar, sabedora de que en casa organizamos una cena mensual temática de alguno de nosotros tres (ya tuvimos la cena portuguesa, la andaluza, anoche la griega...falta la gallega).
Por tanto ayer empezamos a prepararlo todo desde las seis de la tarde.
Ella habia ido a Grecia una semana antes expresamente a por alimentos griegos y no admitió ninguna intrusión de alimentos que no fueran de allí. Es decir, vino cargada con una maleta que sobrepasaba en 46 kilos el límite con tal de traerse el tomate frito apis de Grecia, el yogur griego, quesos de allí, salchichas de allí (como las de Campofrío pero helenas)...vamos...era como Paco Martínez Soria cuando iba cargado del pueblo a ver a las hijas en la ciudad.
Katerina organizó un menú enorme, y el cocinero finalmente fué Manué, uséase, yo, porque ella simplemente iba leyendo las recetas escritas de puño y letra por su madre...pero el que vigilaba el fuego, removía, pelaba... era er nene...también nos ayudó Sofía (lo hacíamos en su piso, es mi excompañera) y luego ella se involucró un poquito mas.
Iban a venir 12 personas, así que había que hacer mucha comida.
Preparamos primero un tzatziki (que me encanta, yo lo solía comprar a una griega de La Boquería), pero uno muy casero, con el pepino rallado por los agujeros grandes del rallador, a pesar de que le dije que los pequeños eran mas idóneos. Lo mezclamos con el denso y pastoso yogur griego auténtico que se trajo, ajos rallados, vinagre griego pero corrientito, aceite de oliva virgen extra griego, sal, pimienta...
También hicimos una ensalada con tomate, pimiento, alcaparras y feta, además de alguna otra cosa que no recuerdo.
Preparamos dos platos con diferentes quesos griegos, uno ahumado (del que ella me trajo también para mí, y me encanta) y otro mas corrientito. En el centro de cada plato puso tomates secos griegos en conserva.
Después preparamos una especie de 'antipasti' o canapés griegos, con un pan tostado en rodajitas que ella trajo de allí, y que había que pasar por agua (:S), untar con una mezcla de tomate y cebolla rallados con especias, ponerle encima un queso desmenuzado parecido al feta pero dulzón y riquísimo, adornarlo con aceituna y alcaparra y regarlo con aceite griego.
Luego nos pusimos con el 'pasticcio', un plato tradicional griego que no es más que su propia versión de la lasaña italiana. Se hace con unos espaguetis gordísimos y huecos, que se parten en dos al echarlos a una olla con agua, sal...y por supuesto aceite griego.
Una vez cocidos los mezclaba con un queso rallado griego muy potente, y creo que con huevo batido, pero no recuerdo bien. Aparte hicimos el sofrito de carne, con cebolla dorada, carne picada de vacuno, un chorro de tomate frito griego, especias que su propia madre le había molido y se lo había metido en papel albal....y agua, y dejamos que cociese.
Untó una bandeja de cristal para horno con mantequilla y puso una primera capa de esos espaguetones ya llenos de queso rallado. Enmedio el sofrito y luego la capa final de espaguetones. Abrió un sobre de bechamel instantánea griega y me dijo que la tenía que batir con leche...así lo hice y en cuestión de segundos se formó una bechamel tan espesa y fina que ni Arguiñano.
Se la puso por encima, más queso rallado, y al horno una hora. ¡Una hora, con todos los ingredientes ya hechos! de locura...
Pero aún quedaba mas.
Siguiente plato, un pastel de queso feta y calabacín. Nos pusimos a rallar calabacines, los mezcló con cebolla rallada (creo) y 3 huevos, batió bien y añadió el feta. A un molde de bizcocho le puso una lámina de hojaldre, el relleno y tapó con otra. Al horno.
Mientras el pasticcio y la tarta se cocían juntitos en el horno, se puso a trocear las salchichas griegas para freírlas en el momento en que todos estuviéramos en la mesa.
Además hizo una especie de papillotes o liaditos de papel albal, dentro de los cuales puso tomate aliñado, pimiento, especias y feta, y al horno.
Y no hablo del postre, que lo había hecho la noche antes en casa...una especie de gelatina rosada de yogur griego, con trozos de melocotón.
Total...un menú para no volver a comer en un mes...
Cuando estuvimos todos, empezó a salir comida de todos los sitios donde la teníamos preparada...y faltaba espacio.
Lo primero fue el pasticcio...estaba exquisito, pero a la carne le faltaba 'un argo' y ya se lo dije cuando la cocíamos...pero seguía receta de la mamma. El pasticcio te dejaba ya medio lleno.
Después vino la tarta de feta y calabacín, Dioooossssssssssssssssssss ¡qué cosa más rica!.
Probamos también los panecillos húmedos con tomate y queso (la textura no me gustó, mordí solo medio pan), el tzatziki (estaba bueno, pero prefiero el de La Boquería), los quesos, las salchichas fritas al momento, los papillotes de verdura con queso (¡deliciosos!)...
Con tantas cosas, la ensalada se quedó compuesta y sin novio.
Madre mía...aquel banquete era digno de Carpanta...totalmente pantagruélico.
Entre comida y comida, cerveza, vino blanco, tinto...
Y desde que dejamos de comer se pusieron todos a hablar de cosas del laboratorio (anoche yo era el único que no trabajaba en el laboratorio donde están todos) y empecé a aburrirme como una ostra. Todo el mundo se liaba cigarrillos (no porros), bebía, etc...y yo esperando el postre.
Como el monotema me aburría, me marché.
Katerina me dió las gracias efusivamente por ayudarla (¿? mejor dicho me ayudó ella a mi, jajajaj) y por hacer de su primera experiencia con los fogones una gran noche.
Al final...después de una semana tan mala, anoche me acosté mucho mejor. Ayer me había llamado también mi amigo Jesús, de Isla Cristina, y habíamos hablado mas de media hora...consiguiendo hacerme reír.
Los problemas siguen ahí, tal vez tenga que cambiarme de piso cuando acabe el verano y estoy un poco cansado de mucha gente que me rodea...pero como siempre, trataré de renacer de mis cenizas y punto.
Ahora me voy a ir a votar (UPyD), a comprame El País porque hoy regalan 'Dune' y me voy a la Feria Romana de Sant Boi de Llobregat.
Hay que desconectar.
Ella no ha cocinado nunca, tiene una gran 'mamma' que no deja que sus hijos metan las narices en la cocina, pero aun así ha querido cocinar, sabedora de que en casa organizamos una cena mensual temática de alguno de nosotros tres (ya tuvimos la cena portuguesa, la andaluza, anoche la griega...falta la gallega).
Por tanto ayer empezamos a prepararlo todo desde las seis de la tarde.
Ella habia ido a Grecia una semana antes expresamente a por alimentos griegos y no admitió ninguna intrusión de alimentos que no fueran de allí. Es decir, vino cargada con una maleta que sobrepasaba en 46 kilos el límite con tal de traerse el tomate frito apis de Grecia, el yogur griego, quesos de allí, salchichas de allí (como las de Campofrío pero helenas)...vamos...era como Paco Martínez Soria cuando iba cargado del pueblo a ver a las hijas en la ciudad.
Katerina organizó un menú enorme, y el cocinero finalmente fué Manué, uséase, yo, porque ella simplemente iba leyendo las recetas escritas de puño y letra por su madre...pero el que vigilaba el fuego, removía, pelaba... era er nene...también nos ayudó Sofía (lo hacíamos en su piso, es mi excompañera) y luego ella se involucró un poquito mas.
Iban a venir 12 personas, así que había que hacer mucha comida.
Preparamos primero un tzatziki (que me encanta, yo lo solía comprar a una griega de La Boquería), pero uno muy casero, con el pepino rallado por los agujeros grandes del rallador, a pesar de que le dije que los pequeños eran mas idóneos. Lo mezclamos con el denso y pastoso yogur griego auténtico que se trajo, ajos rallados, vinagre griego pero corrientito, aceite de oliva virgen extra griego, sal, pimienta...
También hicimos una ensalada con tomate, pimiento, alcaparras y feta, además de alguna otra cosa que no recuerdo.
Preparamos dos platos con diferentes quesos griegos, uno ahumado (del que ella me trajo también para mí, y me encanta) y otro mas corrientito. En el centro de cada plato puso tomates secos griegos en conserva.
Después preparamos una especie de 'antipasti' o canapés griegos, con un pan tostado en rodajitas que ella trajo de allí, y que había que pasar por agua (:S), untar con una mezcla de tomate y cebolla rallados con especias, ponerle encima un queso desmenuzado parecido al feta pero dulzón y riquísimo, adornarlo con aceituna y alcaparra y regarlo con aceite griego.
Luego nos pusimos con el 'pasticcio', un plato tradicional griego que no es más que su propia versión de la lasaña italiana. Se hace con unos espaguetis gordísimos y huecos, que se parten en dos al echarlos a una olla con agua, sal...y por supuesto aceite griego.
Una vez cocidos los mezclaba con un queso rallado griego muy potente, y creo que con huevo batido, pero no recuerdo bien. Aparte hicimos el sofrito de carne, con cebolla dorada, carne picada de vacuno, un chorro de tomate frito griego, especias que su propia madre le había molido y se lo había metido en papel albal....y agua, y dejamos que cociese.
Untó una bandeja de cristal para horno con mantequilla y puso una primera capa de esos espaguetones ya llenos de queso rallado. Enmedio el sofrito y luego la capa final de espaguetones. Abrió un sobre de bechamel instantánea griega y me dijo que la tenía que batir con leche...así lo hice y en cuestión de segundos se formó una bechamel tan espesa y fina que ni Arguiñano.
Se la puso por encima, más queso rallado, y al horno una hora. ¡Una hora, con todos los ingredientes ya hechos! de locura...
Pero aún quedaba mas.
Siguiente plato, un pastel de queso feta y calabacín. Nos pusimos a rallar calabacines, los mezcló con cebolla rallada (creo) y 3 huevos, batió bien y añadió el feta. A un molde de bizcocho le puso una lámina de hojaldre, el relleno y tapó con otra. Al horno.
Mientras el pasticcio y la tarta se cocían juntitos en el horno, se puso a trocear las salchichas griegas para freírlas en el momento en que todos estuviéramos en la mesa.
Además hizo una especie de papillotes o liaditos de papel albal, dentro de los cuales puso tomate aliñado, pimiento, especias y feta, y al horno.
Y no hablo del postre, que lo había hecho la noche antes en casa...una especie de gelatina rosada de yogur griego, con trozos de melocotón.
Total...un menú para no volver a comer en un mes...
Cuando estuvimos todos, empezó a salir comida de todos los sitios donde la teníamos preparada...y faltaba espacio.
Lo primero fue el pasticcio...estaba exquisito, pero a la carne le faltaba 'un argo' y ya se lo dije cuando la cocíamos...pero seguía receta de la mamma. El pasticcio te dejaba ya medio lleno.
Después vino la tarta de feta y calabacín, Dioooossssssssssssssssssss ¡qué cosa más rica!.
Probamos también los panecillos húmedos con tomate y queso (la textura no me gustó, mordí solo medio pan), el tzatziki (estaba bueno, pero prefiero el de La Boquería), los quesos, las salchichas fritas al momento, los papillotes de verdura con queso (¡deliciosos!)...
Con tantas cosas, la ensalada se quedó compuesta y sin novio.
Madre mía...aquel banquete era digno de Carpanta...totalmente pantagruélico.
Entre comida y comida, cerveza, vino blanco, tinto...
Y desde que dejamos de comer se pusieron todos a hablar de cosas del laboratorio (anoche yo era el único que no trabajaba en el laboratorio donde están todos) y empecé a aburrirme como una ostra. Todo el mundo se liaba cigarrillos (no porros), bebía, etc...y yo esperando el postre.
Como el monotema me aburría, me marché.
Katerina me dió las gracias efusivamente por ayudarla (¿? mejor dicho me ayudó ella a mi, jajajaj) y por hacer de su primera experiencia con los fogones una gran noche.
Al final...después de una semana tan mala, anoche me acosté mucho mejor. Ayer me había llamado también mi amigo Jesús, de Isla Cristina, y habíamos hablado mas de media hora...consiguiendo hacerme reír.
Los problemas siguen ahí, tal vez tenga que cambiarme de piso cuando acabe el verano y estoy un poco cansado de mucha gente que me rodea...pero como siempre, trataré de renacer de mis cenizas y punto.
Ahora me voy a ir a votar (UPyD), a comprame El País porque hoy regalan 'Dune' y me voy a la Feria Romana de Sant Boi de Llobregat.
Hay que desconectar.
jueves, 4 de junio de 2009
'DUNE' EL PRÓXIMO DOMINGO CON ABC
Una de las películas más inquietantes y fascinantes que ha dado la ciencia-ficción, 'Dune', viene de regalo el próximo domingo con ABC.
Una cinta que sólo vi una vez, no recuerdo si en el cine o en televisión, y que me dejó profundamente turbado. Aquellos gusanos gigantes surcando las arenas de un extraño planeta, aquella estética, vestuarios, personajes, historia...
algo tan onírico y extraño que sólo David Lynch podía haberlo inventado.
Autor luego de series y películas tan extrañas, personales y diferentes como 'Twin Peaks', 'Carretera perdida', 'Terciopelo azul' o 'Mulholland Drive', es un director que o bien fascina o bien decepciona, no tiene punto medio. Tiene seguidores incondicionales o gente como yo, que lo mismo quedé ensimismado con 'Twin Peaks' o 'Dune', que salí del cine maldiciéndole por 'Carretera perdida'.
Dice un crítico que 'Dune' hoy día la puedes ver dos veces. La primera, te deja absorto, la segunda..te provoca la risa.
Hoy es un título de culto de la ciencia-ficción a la altura de 'Blade Runner'..y el próximo domingo la regalan con el periódico.
He estado toda mi vida deseando que la pusieran de nuevo en televisión y nunca llegó ese momento. El domingo a primera hora iré a por mi preciado tesoro.
Una cinta que sólo vi una vez, no recuerdo si en el cine o en televisión, y que me dejó profundamente turbado. Aquellos gusanos gigantes surcando las arenas de un extraño planeta, aquella estética, vestuarios, personajes, historia...
algo tan onírico y extraño que sólo David Lynch podía haberlo inventado.
Autor luego de series y películas tan extrañas, personales y diferentes como 'Twin Peaks', 'Carretera perdida', 'Terciopelo azul' o 'Mulholland Drive', es un director que o bien fascina o bien decepciona, no tiene punto medio. Tiene seguidores incondicionales o gente como yo, que lo mismo quedé ensimismado con 'Twin Peaks' o 'Dune', que salí del cine maldiciéndole por 'Carretera perdida'.
Dice un crítico que 'Dune' hoy día la puedes ver dos veces. La primera, te deja absorto, la segunda..te provoca la risa.
Hoy es un título de culto de la ciencia-ficción a la altura de 'Blade Runner'..y el próximo domingo la regalan con el periódico.
He estado toda mi vida deseando que la pusieran de nuevo en televisión y nunca llegó ese momento. El domingo a primera hora iré a por mi preciado tesoro.
lunes, 1 de junio de 2009
DICHO Y HECHO
Acaba este largo fin de semana (con lunes festivo en Barcelona) y además de que nadie se ha molestado en llamarme para proponerme nada (como era de esperar) he sabido aprovechar el tiempo.
- tuve una maravillosa mañana de playa nudista, con baño incluído en aguas heladas y transparentes y sol tórrido acariciando mi piel, rodeado de cuerpos fornidos
- fui al cine dos veces
- uno de los días fui a ver la exposición de Palladio al Caixaforum (me encantó)
- hoy he visto la de cine en el Palau Robert (me dejó boquiabierto)
- fui al mercado medieval de Nou Barris (que me encantó)
- paseé por Rambla Catalunya con un sol y una brisa deliciosos
- he dedicado tiempo a hacerme de comer
- me he llevado un libro para leer al sol en un banquito y han intentado ligar conmigo (o mas bien llevarme al harén)
y no he parado de pasear, probar cosas y recibir las energías que tanto necesitaba.
Mañana comienza una nueva semana de trabajo, más corta, pero como se suele decir...que me quiten lo bailao.
Decía una canción holandesa de los 90 en Eurovisión algo así como 'niemand heft noj tijd'...y yo añado que a partir de ahora sí que lo tendré yo para mi.
- tuve una maravillosa mañana de playa nudista, con baño incluído en aguas heladas y transparentes y sol tórrido acariciando mi piel, rodeado de cuerpos fornidos
- fui al cine dos veces
- uno de los días fui a ver la exposición de Palladio al Caixaforum (me encantó)
- hoy he visto la de cine en el Palau Robert (me dejó boquiabierto)
- fui al mercado medieval de Nou Barris (que me encantó)
- paseé por Rambla Catalunya con un sol y una brisa deliciosos
- he dedicado tiempo a hacerme de comer
- me he llevado un libro para leer al sol en un banquito y han intentado ligar conmigo (o mas bien llevarme al harén)
y no he parado de pasear, probar cosas y recibir las energías que tanto necesitaba.
Mañana comienza una nueva semana de trabajo, más corta, pero como se suele decir...que me quiten lo bailao.
Decía una canción holandesa de los 90 en Eurovisión algo así como 'niemand heft noj tijd'...y yo añado que a partir de ahora sí que lo tendré yo para mi.
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